En 1989 en la universidad de Berkeley en Estados Unidos, un grupo de académicos se plantearon qué hacer ante la crisis ecológica. Surgió la Ecopsicología que es un nuevo paradigma donde se une la Psicología y la Ecología, contribuyendo al medio ambiente desde el crecimiento personal. Se recopilaron estudios, reflexiones e investigaciones que se habían realizado desde los años 60 por diferentes profesionales. Desde el año 2005 se sigue trabajando desde IES (Sociedad Internacional de Ecopsicología), teniendo representación en nuestro país con la Escuela de Ecopsicología de España.

Son muchas las investigaciones realizadas desde los años 70, cuando dio comienzo la Psicología Ambiental que han demostrado la influencia que tiene el entorno natural en el ser humano. La “Teoría de la recuperación del estrés” de Ulrich está respaldada por muchas investigaciones, el contacto con la naturaleza tiene un efecto regenerativo a nivel físico y mental. Kaplan formula su “Teoría de la recuperación de la atención” y señala que la fatiga mental disminuye cuando nos relacionamos con el medio ambiente.

En la actualidad cada vez escuchamos más sobre el cambio climático, la desaparición de las especies.. y la repercusión que tendrá en próximas generaciones. La Ecopsicología surge como respuesta a la crisis ecológica y une el malestar del mundo con el sufrimiento del ser humano. El psicólogo Daniel Goleman presenta la “inteligencia ecológica”, transmitiendo que somos naturaleza y formamos parte de la vida, teniendo la responsabilidad de cuidar el medio ambiente.

El mundo moderno ha cambiado nuestra relación con la naturaleza, tenemos un ritmo rápido y desmedido para cubrir las exigencias cotidianas y sociales que poco tiene que ver con los ritmos y ciclos naturales. El educador Richard Louv habla de “síndrome de déficit de naturaleza” refiriéndose a las consecuencias negativas que tiene para los niños la disminución de experiencias con el entorno natural y señala que “cuanta más tecnología, más naturaleza necesitamos”. Esta visión también es atribuible a los adultos.

Los ecopsicólogos del Equipo Kiluz nos dicen que “La Ecopsicología propone la Reconexión con la naturaleza que somos y de la que formamos parte para recuperar la biofilia, el sentido vital y el poder personal”. Cuando nos hacemos conscientes de que somos naturaleza y pertenecemos a la vida, se crea un vínculo afectivo denominado Biofilia (E. Wilson) que nos motiva a cuidar lo que amamos. Este vínculo que se crea con la naturaleza nos da un sentido a la vida y felicidad.

La Ecopsicología facilita la relación, donde la naturaleza nos apoya e inspira con sus paisajes, ríos, bosques, desiertos…, acompañándonos en nuestro proceso personal, en la búsqueda del equilibrio físico, emocional, mental y relacional al mismo tiempo que contribuimos en el cuidado del Planeta con nuestras habilidades, capacidades y fortalezas. La Ecopsicología es la mejor manera de responsabilizarnos con el Planeta porque nos damos cuenta de lo que somos y agradecemos. El entorno natural nos inspira, crea emociones positivas, cambia los pensamientos, relaja y aumenta la vitalidad.

El contacto con la naturaleza nos ayuda a tomar conciencia del equilibrio, los cambios y los ritmos observando los ciclos como las estaciones, el día y la noche, los meses lunares o el crecimiento de una planta y lo proyectamos en nosotros mismos llevándolo a la vida cotidiana.

Si reflexionamos en profundidad podemos preguntarnos ¿quién soy?, ¿de dónde vengo?, ¿qué quiere la vida de mí..? Cuando nos relacionamos con el entorno natural estando presentes a través de la atención y la escucha consciente, observando el exterior con los sentidos (vista, oído.) y percibiendo nuestro interior (cuerpo, emociones, pensamientos...) llega la armonía y la respuesta a nuestras preguntas.

Si quieres conocer más sobre el tema, estás invitado a asistir a la ponencia organizada por el Colegio Oficial de Psicólogos de Castilla y León dentro del ciclo ‘Psicología hoy ¿Qué puede hacer por ti?’, que se celebra este miércoles en la Fundación Tatiana (17,30 horas).