Una campaña en la que pedirán el voto a los abulenses, porque “todos los abulenses tienen, al menos un motivo para votarlos”, tal como ha asegurado Sánchez Cabrera, defendiendo que en la actualidad, Ávila “no es la misma que hace cuatro años”, sino que es “mejor”, aunque tienen “que seguir trabajando”.

Por su parte, el presidente de Por Ávila, José Ramón Budiño, ha destacado el crecimiento exponencial que ha tenido la formación en la provincia, donde ha crecido más de un 500 por cien con las candidaturas presentadas, respecto a las listas presentadas en 2019. Por lo que sus expectativas son “buenísimas”, tanto en la provincia como en la capital. 

El candidato a la alcaldía abulense ha defendido su objetivo para lograr la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Ávila: “No queremos depender ni de derechas ni de izquierdas, queremos ser libres para defender los intereses de los abulenses”, añadiendo que “quieren ganar las elecciones arrasando”. Así lo aseguró también Sánchez Cabrera hace unos días cuando la formación amarilla dio a conocer la candidatura con la que concurren a las elecciones. 

En este sentido, Sánchez Cabrera ha expuesto los motivos “que tienen los abulenses para votarlos”, como la inversión del Ayuntamiento superior a los 50 millones de euros o que las empresas abulenses hayan concurrido a un 54 por ciento del total de las licitaciones públicas municipales, siendo adjudicatarias del 92 por ciento de las que se han presentado, es decir que 40 millones del Consistorio han ido directamente a empresas abulenses. También ha puesto en valor la disminución de la deuda en 6 millones de euros en cuatro años, al igual que la inversión de los 25 millones de euros cofinanciados por Europa, por los que se están llevando a cabo obras “molestas”, pero “necesarias”.

Sobre las obras que está sufriendo la ciudad, ha pedido disculpas, al tiempo que ha asegurado que el cambio por el que apostaron los abulenses hace cuatro años, “implica que hagan cambios en las infraestructuras” y que, a diferencia de los partidos anteriores, “no van a parar de hacer obras por intereses electoralistas”. 

“Cada uno de los abulenses tiene al menos una razón para votar a Por Ávila”, ha repetido, por lo que saldrán “a pedir el voto a todos y cada uno de los abulenses, porque quieren los votos de todos” ya que -asegura- “si Ávila está unida, se conseguirá el cambio de la ciudad”. 

Sobre la tradicional pegada de carteles que se celebra en la plaza Santa Ana para dar el pistoletazo de salida a la campaña electoral, el cabeza de lista de la formación amarilla ha confirmado que no asistirán: “Que no nos espere nadie allí, no vamos a estar. Porque no queremos que nadie pueda confundirnos con ninguno de los que van a estar allí”. De esta forma, ha defendido su forma diferente de hacer política, “pegada a pie de terreno, cercana con la gente, honesta y trabajando”.

Por lo que se niega a estar con los que han prometido durante años “cosas que no se han cumplido” como el peaje de la AP 6, la autovía A40, el Museo Del Prado, así como la unidad de radioterapia. “16 años, mira que me duele, esperando la unidad de radioterapia que prometió Juan Vicente Herrera y que no han cumplido”, ha reivindicado con cierto tono de enfado el candidato a la alcaldía de Ávila.