Al comenzar el concierto, a las 23 horas, la plaza no estaba ni a la mitad de su aforo, pero una hora después, tras la victoria del Madrid en la Copa del Rey, aumentó el público, que bailo al ritmo de la gira ‘Kubobox’, con la que la orquesta gallega presume de ser una gramola rodante que recorre España haciendo música de todos los estilos y con el escenario móvil más grande de Europa.

Más de docena de cantantes, músicos y acróbatas sobre un  escenario en el que los juegos de luces resplandecieron en el Mercado Chico, en el que la lluvia no impidió el espectáculo y el baile, incluido en el programa de fiestas de San Segundo. 

Y todo ello con el lema que usa la orquesta gallega: “no somos una orquesta, no somos un grupo, somos Kubo”.