Encinar destaca el ‘’aval’’ que supone para todos los vecinos la experiencia en la gestión pública de su compañero de candidatura, que acumula ya dos mandatos como edil, así como la suya propia, también por motivos profesionales.

La línea de trabajo que los dos candidatos de Nuestra Tierra ofrecen al pueblo de La Serrada supone una ‘’clara apuesta por los elementos y proyectos que han guiado su actuación durante los últimos cuatro años’’. Así, ha apostado por la colaboración y cooperación directa con otras instituciones, la mejora de las infraestructuras y equipamientos municipales y dotar al pueblo de nuevas instalaciones sostenibles económicamente y demandadas por los vecinos, como un frontón municipal, del que están estudiando su implantación, “con novedades en las próximas semanas”.

“Fruto de esta estrecha colaboración con lealtad institucional, se han desarrollado obras como el reasfaltado y ampliación de la carretera de entrada al pueblo, obra necesaria y que mejora diariamente la calidad de vida de los vecinos’’, incide Encinar, aprovechando para ‘’agradecer nuevamente a la Diputación” su ejecución,

No subir impuestos
En materia económica, los candidatos de Nuestra Tierra se comprometen a ‘’no subir ningún impuesto municipal’’, así como a ‘’estudiar la viabilidad de bajar aún más los mismos’’, dentro de las posibilidades del Ayuntamiento.

Por otro lado, en relación con los servicios públicos, además de la rehabilitación definitiva de la nave multiusos municipal, que ‘’supondrá contar con un edificio de buenas dimensiones en el que pueden realizarse todo tipo de eventos, y en adecuadas condiciones’’, se potenciarán los festejos municipales, con eventos que tanto pequeños, como jóvenes, adultos y personas de la tercera edad puedan disfrutar, ‘’en estrecha colaboración con todo aquel que, desde el pueblo, quiera participar y colaborar con el Ayuntamiento en la organización de todos los eventos’’. 

Además, seguirán pidiendo al resto de Administraciones, como ya ha hecho Encinar de manera pública, que ‘’no se reduzcan ni lo más mínimo los servicios sanitarios que se ofrecen en el pueblo, solicitando además su ampliación’’ y que ‘’la atención sanitaria que reciben los habitantes del medio rural no sea inferior a la que reciben aquellos que viven en una ciudad, especialmente para los colectivos más vulnerables, como son los más pequeños y nuestros mayores’’.