Se le acusa de ser presunto autor de un delito de robo con fuerza en establecimiento. El hecho ocurrió el fin de semana, el sábado, cuando sobre las 5 horas de la madrugada se alertó al 091 de un robo en un establecimiento de la zona sur de la capital, aportando las características físicas del presunto autor.

Los primeros agentes que se personaron en el establecimiento observaron que el escaparate estaba fracturado, localizando debajo de un vehículo una tapa de alcantarilla, con la que supuestamente el autor habría roto el cristal. Los policías comprobaron que las vitrinas del escaparate habían sido manipuladas, encontrando sobre ellas restos de sangre en diversas zonas.

Mientras la primera dotación que acudió al lugar comprobó los daños producidos, otra patrulla localizó en una calle adyacente a un varón que caminaba a gran velocidad, y que al percatarse de la presencia de los agentes cambió la dirección de su marcha con la intención de esquivarles.

Una vez identificado el varón se observó que tenía una herida sangrante en una de sus manos, sin que pudiera justificar como se la había producido. Así se consideró que había indicios suficientes para determinar que era presunto autor del delito de robo con fuerza, por lo que fue detenido. Tras prestar declaración en Comisaría fue puesto a disposición de la autoridad judicial.