Ha estado acompañado del presidente de la Diputación, Carlos García; del alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera; y la diputada y candidata a la alcaldía del PP, Alicia García; el director del gabinete del presidente, Héctor Palencia; y los tenientes de alcalde José Ramón Budiño y Sonsoles Prieto; quienes han sido guiados por el prior del convento, David Jiménez. 

En la basílica el presidente ha afirmado en el libro de visitas con unas reflexiones personales, según indicó a los que allí se encontraban, y ha recibido, por prior de los carmelitas, su credencial al haber cruzado por la puerta santa, en el año teresiano. Asimismo, ha visitado el museo teresiano, donde también ha estampado su rúbrica en el libro de visitas. 

En la visita Mañueco ha querido agradecer a los carmelitas “su hospitalidad”. En palabras del presidente regional, para él, “como peregrino, es un acontecimiento importante haber cruzado la puerta santa en este año jubilar de Santa Teresa. Una mujer, una santa que ha sido capaza de ofrecer su testimonio de vida, su pensamiento y, sobre todo, su espiritualidad y su fe a todo el mundo”. 

En este sentido, Fernández Mañueco se ha referido a la relevancia que ha adquirido el mensaje de la mística abulense con el paso del tiempo: “Más allá de los sentimientos y las creencias de cada persona, ese testimonio de su vida, de su obra, de su mensaje, ha trascendido”. Por ello, ha defendido la labor que se hace desde el convento “de protección y de divulgación de su pensamiento”.

“Santa Teresa es un referente actual y lo ha sido en el pasado porque prácticamente al poco de fallecer ya tuvo reconocimiento -la beatificación- y lo va a seguir siendo en este mundo en el que vivimos”, ha señalado el presidente regional. “Necesitamos referentes que tengan las ideas claras de cómo debemos actuar y comportarnos como personas, como seres humanos y como responsables púbicos, es muy importante”, ha subrayado.