“Por fin el Ayuntamiento de Pedro Bernardo vuelve tener suelo industrial”, ha destacado el presidente de la patronal, Diego Diez, que ha destacado la situación de la localidad, “el balcón del Tiétar”, con “una perfecta conexión con la A-5 con Extremadura”.

“Todos sabemos lo que difícil que es emprender en la España Vaciada”, ha explicado el alcalde, David Segovia, quiere atraer empresas y aportar “una gota de esperanza, para que nuestros hijos y nietos no lo tengan tan difícil” en una localidad que “se va apagando desde 1986” cuando se produjo un grave incendio.

“Ya hay empresas que se han puesto en contacto con nosotros, cuchareros y de fuera, teniendo en cuenta que las iniciativas empresariales pueden afectar a los pueblos cercanos”, ha señalado el regidor, quien ha animado a los empresarios abulense a tener en cuenta a Pedro Bernardo.

Antiguas naves

El acuerdo entre el Ayuntamiento y el empresario supone que el Consistorio promocionará la instalación de empresas y emprendedores en unas naves que se construyeron para el almacenamiento, aserradero y tratamiento de madera tras el incendio de 1986, y que se encuentran abandonadas. 

“Pensamos en reformarlas y darlas un nuevo uso para pequeñas empresas, como las agroalimentarias”, que podrán tener una zona común de reunión, “a modo de vivero de empresas del entorno rural, con espacio para almacenamiento, y para que los emprendedores no se encuentren solos y tengan costes más bajas”, ha explicado el arquitecto municipal, Joaquín Antuña.

En este espacio se podrá dar cabida a entre 12 y 14 empresas y, según ha señalado, existe un potencial a la hora de comercializar la oliva, los higos o la cereza, “una serie de productos que en calidad, no en cantidad, no tienen rival, muy cerca de la salida 136 de la autovía del Suroeste o A-5, que va a Lisboa.

Por su parte, el empresario Federico Rodríguez aporta el terreno con la intención de darle un uso para un fin que quiere favorecer la economía de su municipio.