Unos 300 responsables municipales han asistido a las cinco reuniones celebradas desde el 1 de marzo en Piedralaves (Valle del Tiétar), Navaluenga (Alberche-Pinares), Naturávila (Sierra de Ávila, Valle Amblés y Sierrecilla), Arévalo (La Moraña) y la de este viernes.

“Hacemos un balance muy satisfactorio; por un lado, político, pues hemos tenido la ocasión de trasladar de primera mano a los alcaldes y secretarios la realidad inversora, de auxilio y de gestión que la Diputación hace en el día a día en las más variadas materias y que es nuestra razón de ser, sin colores políticos y velando por igual por todos los municipios, especialmente por los de menor población”, según el presidente de la institución provincial, Carlos García. 

Por otro lado ha dicho, “también hay que hacer un balance muy positivo en el terreno de los afectos y el reencuentro entre quienes servimos a la ciudadanía desde las entidades locales, pues estas jornadas, que tienen periodicidad anual, no se celebraban desde 2020, cuando lo hicieron solo parcialmente a causa del estallido de la pandemia de la Covid”.

Necesidades

El presupuesto de la Diputación para este ejercicio, de 80,2 millones de euros, el más alto de su historia, es “inversor, expansivo y atento a todas las necesidades que hay en nuestro medio rural”, ha destacado.

En estas jornadas se ha hecho especial hincapié “en las líneas de subvenciones que la constitución provincial pone al alcance” de los ayuntamientos “en cultura, turismo, digitalización, empresa o industria”, y con la inversión que se hace en infraestructuras que “vertebran la provincia”  y en los servicios sociales que “atienden a los abulenses más vulnerables”.  

 El presidente agradece a los participantes “su disposición a aportar ideas y sugerencias, y a reivindicar lo mejor para cada uno de sus ayuntamientos, pues seguir haciendo provincia es tarea de todos y requiere la implicación de todos".