Tras contar con los informes favorables, entre otros, del Ayuntamiento arevalense, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta ha emitido una declaración de impacto ambiental (DIA) "favorable" a dicho proyecto. La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) también ha dado el visto bueo.

Se trata de una instalación dedicada a "la fundición de aluminio a partir de chatarra, residuos y escorias primarias de aluminio y tras la fundición y valorización de estos residuos la obtención de un lingote de aleación", según publica el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl).

La nueva planta se ubicará en el polígono industrial Tierra de Arévalo, incluido dentro del Programa Territorial de Fomento para Medina del Campo (Valladolid) y su entorno 2021-2024, lo que supone que este procedimiento ha sido declarado de urgencia y los plazos legalmente establecidos para su tramitación "queden reducidos a la mitad, de conformidad con lo dispuesto en la normativa aplicable".

La primera fase de este proyecto se edificará sobre una superficie de 15.494,7 metros cuadrados, donde se ubicará una nave cubierta de producción de 5.000 metros cuadrados, que contará con zonas cubiertas de enfriamiento de escorias, de apilamiento de materiales y para material final y muelle de carga.

Además, incluirá instalación, oficinas, laboratorio y almacén de repuestos de 275 metros cuadrados; instalación de depuración de humos de 500 metros, y una zona descubierta de apilamiento de materiales (silos de graneles) y maniobra, así como paso de vehículos, de 10.500 metros cuadrados aproximadamente.

La futura planta dispondrá de una capacidad máxima de fundición de 90 toneladas al día, lo que se traduce en una capacidad anual de 32.850 toneladas.