En su breve intervención, con la imagen de la muralla como marco y ante la plana mayor del partido con su presidente, Alberto Núñez Feijóo, al frente, García ha señalado que "Ávila tiene la luz más profunda, el silencio más claro y el frío más cálido".

A su juicio, es una ciudad que "está orgullosa de su pasado" y que "ha sido clave en momentos de la historia de España". Tras subrayar la belleza de "sus murallas, su casco histórico, sus gentes y sus barrios", ha señalado que "Ávila merece más: un presente y un futuro lleno de oportunidades y de proyectos ilusionantes".

"Por eso quiero ser la alcaldesa de Ávila. Quiero ser la primera trabajadora al servicio de los abulenses", ha añadido, antes de volver a ofrecer su "experiencia, amor y pasión para dinamizar económicamente la ciudad, para hacer una ciudad más cohesionada, con unos excelentes servicios públicos".

"Ávila volverá a sonreír", ha afirmado, para después concluir, destacando que tiene "las ideas claras, las manos abiertas, la valentía para construir juntos una ciudad próspera, optimista y orgullosa de sí misma".