En su visita a Ávila, ha negado que falte suelo, ante lo manifestado desde el Ayuntamiento de Arévalo: "cualquier información diciendo que no hay suelo disponible, lo único que puede hacer es retraer a esas empresas que quieren solicitar información y que quieren instalarse”.

Tras definir el polígono como “un enclave estratégico por su situación” y que su evolución en los últimos años haya sido “realmente positiva”, ha subrayado lo sucedido este año gracias a la bonificación al 50% de los precios (13,23 euros por metro cuadrado), al estar incluido Arévalo en el Plan Territorial de Fomento de Medina del Campo. Cobos cree que hay que afrontar una nueva fase del polígono, pero que no es necesaria para el año que viene “de forma inmediata”.

En 2021 se vendieron ocho parcelas por una extensión de 46.000 metros cuadrados, mientras que en lo que llevamos de 2022 se ha superado el doble, llegando a los 96.000 metros cuadrados, “por tanto esa política de reducción de precios ha sido muy positiva”.

En la actualidad “nos quedan aproximadamente otros 90.000 metros cuadrados”. “Nuestra política –ha señalado- trata de ser muy flexible para simplificar y facilitar a las empresas la adquisición del suelo y, en muchas ocasiones, trabajamos con proyectos de tal manera que puedan reservar sin ningún tipo de coste cuando nos presentan un proyecto que consideramos interesante, que está todavía en una fase inicial para que cuando el proyecto se consolide puedan acceder a la venta directamente a la venta”.

Terrenos en reserva
Según ha indicado, de los 370.000 metros cuadrados del polígono Tierras de Arévalo, “aproximadamente unos 140.000 ya se han vendido”, por lo que “quedarían algo entre 210.000 y 220.000”, si bien de esta cantidad “90.000 ya están bajo reserva”.

“Calculamos que de esos 90.000 en reserva, aproximadamente un 25% (25.000) son operaciones que no llegarán a consolidarse, reservas en las que la empresa decae en su derecho a esa reserva que ha solicitado”.
Así, “ahora mismo tendríamos casi 130.000 metros cuadrados totalmente disponibles, sobre los que no existe ningún tipo de reservas”. Según Cobos, del total de 370.000 metros cuadrados, “un tercio no ha sido solicitado y no está bajo reserva por la tarde”.

Por eso, ha destacado que “todavía hay margen para la ocupación de ese polígono”, puesto que calcula que al llegar 2024 “todavía tendríamos capacidad para seguir vendiendo”

Fase 2
Según el director del ICE, “la fase 1 del polígono de Arévalo tiene todavía recorrido para su comercialización” si bien “es cierto que de las primeras previsiones que pudimos hacer de en qué momento sería necesario acometer la fase 2 los plazos se vayan a cortar o se puedan acortarse van a cortar”.

“Evidentemente no es algo que necesitemos hacer de inmediato para año 2023, porque tenemos todavía recorrido para atender a todas las empresas que quieran instalarse en Arévalo”.

El director del ICE ha indicado que para ofrecer el suelo industrial de Arévalo colaboran con el Ayuntamiento de la localidad “de forma muy eficaz, como es en todos los casos para tratar de atraer las empresas a cualquiera de los polígonos”.

Según ha apuntado el delegado territorial, Jose Francisco Hernández, para la segunda fase hay disponibles 389.000 metros cuadrados, que “si bien no están desarrollados sí es un suelo industrial convenientemente calificado con todas las bendiciones urbanísticas y que ojalá tuviéramos la obligación de desarrollar a toda velocidad”.

“Hoy por hoy tenemos disponibilidad de suelo industrial suficiente para recibir a las empresas que tengan interés en implantarse en Arévalo y, por supuesto, además especialmente bonificado, al precio de 13,23 euros por metro cuadrado, absolutamente competitivo”, aparte de las ayudas que concede la Junta en diversas líneas.

Futura ampliación

Sobre una futura ampliación, el director del ICE ha señalado que el proceso de ampliación “siempre es mucho más rápido que el de la construcción del polígono nuevo”. Además de que “en los últimos meses hemos detectado ofertas de grandes proyectos empresariales que necesitan una gran cantidad de metros cuadrados, y muchas veces lo que prefieren son espacios que aún estén sin urbanizar, donde las parcelas aún no estén perfectamente delimitadas, porque eso permite una urbanización casi a la carta”.

“Hay que plantear –ha añadido- que el hecho de tener esa fase 2, diseñada pero no acometida, nos permitiría, en el caso de que llegará una gran empresa que necesitara una gran disponibilidad de metros cuadrados, poder trabajar para ella haciendo esa urbanización casi a la carta, que son procesos que hemos visto ya”.