“Una vez que se ha comprendido algo, hay que poner nombre a eso. Sin embargo, habitualmente lo hacemos al revés, partimos de cómo se llaman las cosas y luego ya vemos si conocemos que son, pero primero hay que saber qué son las cosas y luego como se llaman”, apuntaba Fernández Bravo, minutos antes de realizar la charla.

Otra de las pautas importantes que el investigador en educación ha querido dar es la de “trabajar con la emoción” y es que “está demostrado que emocionalmente se aprende”. Para ello, los docentes deben hacer “pensar con el corazón y sentir con la razón” para dotar con “un envoltorio muy grande a la inteligencia emocional” de su alumnado.

Para Fernández Bravo hay que dejar de “aprender desde el cerebro de quién enseña para hacerlo desde el que aprende”. Y esto es lo que ha querido trasmitir a los más de 300 participantes de la ponencia, quien también han podido exponer algunas de sus reivindicaciones.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha llevado la charla de este investigador educativo por varias capitales de provincia de Castilla y León y tiene previsto visitar aquellas que aún no lo han hecho. En esas ponencias, tal y como ha señalado la presidenta del sector de Educación de CSIF Castilla y León, Isabel Madruga, han detectado que “hay una falta de recursos evidente” y un “clima de desasosiego en las aulas”.

“El profesorado está excesivamente cargado con burocracia absolutamente innecesaria y con una implantación de la nueva ley educativa (Lomloe) que no parte de los profesionales de la educación”, afirma.

Dejadez en las administraciones

Madruga considera que las administraciones tienen “mucha dejadez” cuando se tratan de temas educativos y que deberían de enfocarse a “mejorar el clima en las aulas y la convivencia escolar” porque esto supondría “una mejora en el rendimiento académico” del alumnado. Para ello, el sindicato “pone el foco de atención en el profesorado, hay que ayudarle y darle el lugar que se merece y que las administraciones educativas nacionales y autonómicas no están haciéndolo”.

En estos momentos, el profesorado se encuentra en un periodo de evaluaciones, pero están “a caballo” entre la programación y la evaluación porque el “currículo de la Lomloe no se publicó hasta el 30 de septiembre en Castilla y León, con el curso ya empezado”.

Desde CSIF piden reducir las tareas burocráticas para que el profesorado “pueda dedicarse a enseñar”, además de una “reducción de ratios que es imprescindible” y no “obligarles a la realización de documentos que luego ni se solicitan” para “dedicarse íntegramente a enseñar que es para lo que están formados y para lo que deben dedicarse”.

Un hecho al que también ha hecho alusión el ponente de la charla, ya que considera que “a veces para avanzar hay que perder” y, por lo tanto, las administraciones deberían de conocer que “pueden quitar para poder avanzar” en educación. Además, también ha exigido una “formación permanente del profesorado” y “asignaturas más prácticas respecto a lo que luego exige la función del docente” en la carrera.