Se trata del nuevo reglamento de procesos selectivos y formación de la Policía Nacional, que definitivamente elimina el requisito de estatura mínima para acceder al cuerpo, cuya Escuela Nacional se encuentra en Ávila.

Antes de esta decisión, la altura mínima para aspirar a ser policía era de, al menos, 1,65 centímetros en el caso de los hombres, y 1,60 para las mujeres. A partir de ahora, en los próximos procesos selectivos, a partir de 2023, este requisito ya no estará vigente.

De esta manera, se rompe “uno de los techos de cristal" que impedía el acceso de la mujer al cuerpo, según comentó a principios de año el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, teniendo en cuenta que la anterior regulación era más restrictiva en el caso de las aspirantes que en el de los aspirantes a policía.

Este cambio reclamado por la mayoría de sindicatos policiales, hace que la Policía Nacional se equipare a otros cuerpos civiles de policía de países europeos, pese a que los requisitos de estatura mínima se mantendrán para ingresar en determinadas unidades especiales (UIP, UPR y GEO), donde la talla afecta a la operatividad de la labor policial específica que desarrollan.

Incrementar la presencia femenina

Por otra parte, el reglamento aprobado por el consejo de Ministros también incluye otras medidas que pretenden aumentar la presencia femenina en la Policía Nacional, desde el 16,7% del total de la plantilla. 

De esta manera, se permitirá que las aspirantes puedan aplazar sus pruebas de selección si están en periodo gestante, de parto o de posparto. Una medida que también será efectiva para realizar o finalizar el curso de acceso a las prácticas policiales correspondientes si cualquiera de esas situaciones se produjese una vez superadas las pruebas de ingreso.