Tanto el presidente del PP abulense, Carlos García, como la diputada nacional, Alicia García, han criticado que la futura universidad policial no tenga en la capital abulense su sede única, tal y como había demandado esta formación, después de que el centro haya sido aprobado por el Consejo de Ministros.

Al respecto, Carlos García ha indicado que dicho proyecto es “una incógnita”, a la vez que ha criticado el “conformismo y el olvido” del PSOE con Ávila, ya que a su juicio “se conforma con que sea sede principal”.

“Nos tememos que en los próximos meses empezará a entenderse todo y esperamos que si para desgracia de Ávila nuestra escuela se ve privada de uno solo de esos estudios, -Jesús- Caro y -Manuel- Arribas tendrán decencia y dejarán sus actas de senador y diputado respectivamente.

Por su parte, Alicia García ha lamentado que con este proyecto se hayan cumplido “las peores previsiones”, ya que parte del desarrollo del Centro Universitario de la Policía Nacional se desarrollará “en otras sedes”.

Tras apuntar que su grupo estará “muy vigilante” para que “el 100%” de la formación se lleve a cabo en Ávila, de manera que “no se consume otro fraude de Pedro Sánchez”, la parlamentaria popular abulense ha insistido en la necesidad de que todos los alumnos se formen en Ávila.

Lógico y normal

En dirección contraria se ha expresado el alcalde de la capital, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, quien cree que lo importante es que el Ministerio del Interior haya considerado a la Escuela Nacional de la Policía como sede principal, “cumpliendo” con lo que había prometido.

Respecto al hecho de que vaya a tener otras sedes, Sánchez Cabrera lo ha considerado “normal y lógico”, ya que es lo que ocurre con otras universidades, que cuentan en otras provincias con más campus.

“Lo importante es que Ávila va a acoger la sede principal de la formación”, ha concluido sobre este asunto, después de haber calificado de “entendible” que el próximo curso todos los alumnos vayan a alojarse en las instalaciones de la Escuela de Policía, teniendo en cuenta que, además de disponer de más espacio, se trata de una promoción algo menor.

Tras considerar esta circunstancia como “normal”, ha reconocido que le gustaría que muchos alumnos pudieran vivir fuera de estas instalaciones, para que la ciudad tuviera “más vida”, pero esta escuela es un “centro de formación” en “régimen de internado”, por lo que la situación es “entendible”.