Así lo ha explicado el jefe de jornada, Rodrigo Gandía, quien ha apuntado que el retorno del viento está haciendo que surjan nuevamente algunas reproducciones que obligan a mantener el nivel 2 de peligrosidad en este incendio que cumple una semana activo durante la cual ha arrasado 4.500 hectáreas y el pasado lunes obligaron al desalojo del pueblo, aunque desde el pasado jueves los vecinos están retornando a sus casas.

Gandía ha explicado que una de esas reproducciones se sitúa en la zona del cementerio de El Hoyo de Pinares., el segundo en la zona oeste del incendio en el paraje 'la hora de los Sebastianes', y el tercero en una dehesa sin quemar en este municipio, en la zona oeste de los pantanos de El Batán.

A los trabajos para sofocar estas reproducciones han acudido helicópteros de la base de La Iglesuela, en Toledo, y actualmente se trabaja para sofocar estos conatos. "Esperamos hacernos con ellos, en función del viento", ha dicho Gandía.

La Junta de Castilla y León, a través de sus redes sociales, ha informado de que los bulldozeres tratan de "asegurar la cabeza norte ante posibles vientos de componente sur", mientras que la neblina "no permite a los medios aéreos trabajar al cien por cien" de sus posibilidades. 

El uso de cámara térmica "permitirá detectar puntos calientes y optimizar las descargas", según la Administración autonómica.