Un proyecto que, finalmente, Paradinas no verá terminado como presidente de la organización, a pesar de ser una de las figuras precursoras. Esta lucha logró el apoyo de 48.000 firmas y, poco a poco, las organizaciones y partidos políticos mostraron su apoyo.

Las obras del búnker de radioterapia están casi terminadas, aunque hay que esperar a que llegue el acelerador lineal que el Gobierno incluyó en el Plan de Inversión de Equipos de Alta Tecnología INVEAT, financiado con fondos de Plan de Recuperación y Resiliencia.

“Ayer [por el jueves] fue la última vez que estuve. He ido siguiendo las obras estos meses, incluso alguna vez me colaba. Tengo que reconocerlo”, bromeaba Paradinas ante los periodistas durante su despedida, que ha coincidido con la cuestación anual de la asociación, para señalar que tan solo “faltan pequeños detalles”, aunque “todas las instalaciones están hechas”.

El presidente de la AECC deja el puesto tras dos mandatos de cuatro años, lo máximo posible dentro de la asociación, a la espera de que la dirección nacional designe a su sucesor.

Soñar con los primeros tratamientos

Paradinas confiesa que ha estado trabajando para que el acelerador lineal llegará lo antes posible a Ávila: “No es lo mismo renovarlo como en otras provincias, que sea el primero y el único. Estamos intentando que llegue lo antes posible. Si llegará a principios de verano, entre instalación y pruebas, podríamos soñar en dar los primeros tratamientos contra el cáncer a final de año”, apunta.

Por esos ocho años de trabajo, el Ayuntamiento de Ávila ha agradecido públicamente la labor de Ignacio Paradinas, y de su junta directiva, al frente de la Asociación Española contra el Cáncer en Ávila (AECC), que finaliza su “labor incansable para mejorar la calidad de vida de los pacientes oncológicos y de sus familias”. Paradinas, acompañado por el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, ha firmado en el libro de honor del Ayuntamiento.

Desde el Consistorio se ha recordado que la Asociación Española contra el Cáncer en Ávila recibió en 2020 la medalla de oro de la ciudad, la máxima distinción que entrega la institución, en reconocimiento a la trayectoria y labor que viene desarrollando la entidad desde hace casi 60 años.

Y se ha subrayado que entre los logros de su labor se encuentra la próxima implantación del servicio de radioterapia en Ávila, que evitará el desplazamiento de los enfermos que tengan que recibir tratamiento a ciudades como Salamanca.