Se trata de una autobomba ligera de 2,20 metros de ancho y 5,9 de largo, que “permite el acceso por los arcos y las calles estrechas”, ha destacado el jefe del cuerpo, Alfredo Delgado.

“Es de la marca Mercedes, pero es el único es que ofrece estas dimensiones, muy compacto y que permite facilitar el callejeo”, ha apuntado.

El camión “moderniza la flota, porque sustituye a uno del año 1973”, que figura en una partida presupuestaria de 230.000 euros, en la que se incluye este camión, la renovación de otra autobomba y otras reparaciones en vehículos de la flota”, ha indicado el alcalde. Miguel Ángel García Nieto.

“Nuestro cuerpo de bomberos está mejor dotado, hoy estamos más seguros que ayer”, señalado.

La inversión procede del concierto con Unespa (Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras), por la que un porcentaje de los seguros que se hacen en la ciudad van a un fondo común que revierte en el Ayuntamiento.

Delgado ha aportado detalles técnicos del camión, como que el tanque almacena 1.300 litros de agua, cifra inferior a los 4.000 de otras autobombas, pero suficiente para actuar en el casco histórico, donde la red de suministro en las calles es amplia.

El vehículo tiene una potencia de 177 caballos -relación peso potencia de 24 caballos por tonelada cuando el mínimo es 20-, y en sus armarios laterales contiene herramientas de demolición, lanzas y accesorios para las mangueras; en la parte de atrás una bomba combinada de alta y baja presión -que puede trabajar a 45 kilos con 300 litros por minuto o a 15 kilos por 2.000 litros por minuto- y el carrete de primer socorro; y en el otro lado extintores portátiles y material de iluminación, junto a herramientas de corte y separación para barrotes y para accidentes de tráfico.