Así lo ha expresado el comisario de la muestra, Miguel Ángel Espí, ante la segunda ocasión en que este artista de trayectoria internacional cuelga sus obras en el Palacio de los Serrano. Para llegar a ese “momento mágico debe haber una conexión absoluta entre la modelo y el pintor y  han de estar en la misma búsqueda”, por lo que “las  modelos de Royo son en realidad su mujer, sus hijas, sus amigas…y en esta ocasión, el artista les propone un juego”.

“Al principio del siglo XX, los fotógrafos recorrían los pueblos, llegaban a cualquier lugar y montaban su arcaica máquina de fotografiar frente a un mínimo decorado, un telón o un biombo pintado y una silla, quizás algún otro objeto de atrezzo popular improvisado. Ante el objetivo de la cámara de fuelle fueron pasando y en esa silla se iban sentando las personas anónimas, los personajes de una época, para ser inmortalizados por el fotógrafo.

Juego

Aquellas fotografías, imágenes mágicas que aparecían sobre el cartón, plasmaban un tiempo, convertían lo anónimo en icono de una época y de un lugar concreto, a la vez que permitían soñar”: ese es el juego con el que ha creado Royo esta exposición.

‘Mujeres’, con 30 óleos sobre lienzo, se convierte en “un desfile de personalidades fingidas o vividas, atemporales pero fijadas en un instante (no tan lejano), estereotipos eternos o descubrimientos de futuro, en el que las modelos toman las riendas de la creación y generan la mirada a su voluntad”, según el autor. “La mujer es la que hace el cuadro, yo sólo la pinto y dejo constancia de mi admiración”, ha dejado constancia Royo.

La exposición ‘Royo. Mujeres’, que puede verse en el Palacio de los Serrano hasta el 16 de abril, ha sido inaugurada por el propio artista con motivo del Día de la Mujer; junto a la presidenta de Fundación Ávila, Dolores Ruiz-Ayúcar; Natalia Gómez, directora de centro de banca privada de CaixaBank en Ávila; y el comisario de la exposición.