Los pequeños se enfundaron el delantal y el gorro para preparar sus platos en dos jornadas, que cubrieron las plazas de inscripción con 25 participantes en cada una de ellas para “cumplir con las medidas sanitarias”, como ha explicado el teniente alcalde de Presidencia, Interior y Cultura, José Ramón Budiño durante su visita a la actividad.

El primero de los platos consistía en unas pizzas elaboradas con pan de molde, en lugar de su tradicional masa, para que fuera más sencillo para los ‘minichefs’. Por otro lado, según ha señalado la coordinadora del taller, Amara Sánchez, los cocineros han aprendido a hacer un postre navideño con fruta (manzana, kiwi o plátanos) decorado con Lacasitos o siropes. Además, la actividad estaba adaptada para celiacos para que también pudieran disfrutar de esta actividad.

Una de las características más importante de los mejores cocineros es la creatividad para presentar sus platos o para mezclar sabores. Precisamente, a estos pequeños chefs no les ha faltado la imaginación que han elaborado sus pizzas con formas de árbol de Navidad, bolas, botas o estrellas. “Nosotros les damos ideas, pero luego también queremos que ellos desarrollen su imaginación”, explica Sánchez.