Esta iniciativa es consecuencia de la Concentración de Vehículos Clásicos celebrada en Cabañas el 3 de octubre, cuya recaudación ha servido para la donación del agua embotellada a los vecinos del pueblo afectados por el incendio en la Sierra de la Paramera.

Aunque la localidad cuenta con agua potable, todavía el líquido elemento sigue arrastrando cenizas y barro.

La Asociación de Vehículos Clásicos de Cabañas, organizadora del evento, ha agradecido la “colaboración y el compromiso” de los asistentes a la concentración de vehículos, que hacen extensivo a las autoridades municipales, vecinos de Riofrio, así como a la empresa de transporte Paz San, que de forma desinteresada hizo posible la entrega de las garrafas de agua.