Se le acusa de ser presunto autor de los delitos de tráfico de drogas, en la modalidad de cultivo y elaboración de droga, y otro de defraudación de fluido eléctrico. 

La detención se produjo el 27 de octubre, después de que a finales de septiembre se conociera la posible existencia de un laboratorio clandestino de marihuana en una vivienda ubicada en El Herradón de Pinares-La Cañada.

Las investigaciones dieron como resultado la operación Bosque Cañaveral. Con la entrada en el sótano de la vivienda, incautando 994 plantas de marihuana en avanzado estado de floración, que arrojaron un peso de unos 75 kilos, además de 1.886 euros en efectivo, tres hojas donde se describía cómo realizar el cultivo, un machete de grandes dimensiones, una bolsa con semillas de marihuana, 39 lámparas de secado utilizadas para un mayor y rápido crecimiento, 100 transformadores eléctricos, dos básculas de precisión, 3,254 gramos de marihuana preparados para su venta, dos máquinas envasadoras al vacío, y útiles diversos para su mantenimiento. 

Durante el registro también se pudo comprobar que el sistema eléctrico había sido puenteado para conseguir electricidad de manera gratuita. La manipulación se había efectuado de una manera muy sofisticada para evitar ser descubierta la defraudación.

El propietario de la plantación fue detenido y puesto a disposición del Juzgado Primera Instancia e Instrucción número 5 de Ávila, junto todo lo intervenido.

La operación ha sido desarrollada por el Equipo Territorial de Policía Judicial y el Equipo Roca, ambos pertenecientes a la Guardia Civil de Cebreros. En lo que llevamos de año la lleva incautadas cerca de 3.000 plantas de marihuana.