En la referida al botellón proponen “el control de los locales de venta” de alcohol “en la medida de lo posible y en colaboración con la Junta de Castilla y León”, según han presentado en rueda de prensa la portavoz municipal, Sonsoles Sánchez-Reyes, y el concejal Miguel Encinar, quien se han hecho eco de quejas vecinales recibidas.

“Fortalecer de manera efectiva la ejecución de las medidas sancionadoras establecidas en la ley autonómica”, es otra idea contenida en la propuesta, que pide impulsar “más campañas” de sensibilización, prevención y tratamiento sobre los efectos nocivos del alcohol en los colegios e institutos y asociaciones y entidades de la ciudad, así como “charlas para padres e hijos que conciencien sobre los peligros de los botellones”.

También quiere que el Consistorio prepare “nuevos programas municipales de ocio juvenil que recojan distintas iniciativas y que sean una alternativa firme al consumo de alcohol en las calles” que califica como una “lacra”.

La moción destaca que las restricciones motivadas por la pandemia han provocado que proliferen en la ciudad “grupos de personas se reúnen para consumir alcohol”, lo que además de contravenir la normativa autonómica, que “prohíbe la ingesta de estas bebidas en la vía pública”, la situación “trae aparejada la degradación de los lugares donde ocurren estas concentraciones, se genera gran cantidad de residuos, se deteriora el mobiliario urbano, y se producen ruidos y música hasta altas horas, peleas y molestias a los vecinos”.

Quejas
El PP ha señalado que “son numerosos los abulenses” los que les han hecho llegar sus quejas ante una “realidad que, aunque no es nueva, sí ha experimentado un crecimiento en los últimos meses”, y advierten que el botellón es, “además de un problema de orden público, también una cuestión de educación y de informar a los jóvenes y a los padres de las nefastas consecuencias de la bebida para la salud física y psíquica”.

“No se trata de prohibir el alcohol ni de iniciar una cruzada contra estas bebidas, sino de empezar a tomar conciencia de que diversión y alcohol no deben ir siempre necesariamente unidos, y la tolerancia con el botellón es la prueba más evidente de que todos estamos haciendo algo mal”, añade la propuesta del PP, que considera que “desde la familia como desde las Administraciones se debe actuar para educar, concienciar y evitar estas conductas tan nocivas para la sociedad”, en un problema de salud y que también “afecta a la convivencia de los vecinos, a su descanso, a la seguridad y a la limpieza”.

Edificios en peligro
La segunda moción del PP, que se debatirá en el pleno del viernes, quiere que los técnicos municipales elaboren un informe que contenga “el número, antigüedad, estado y tipología de aquellos edificios históricos, tradicionales y arquitectónicamente valiosos de la ciudad de Ávila que se hallan en riesgo de desaparición o presentan problemas de conservación”, y donde se ponga “especial énfasis en aquellos que ahora no gozan de una protección urbanística adecuada por parte de la normativa municipal.

También proponen “impulsar los cambios necesarios en la normativa urbanística municipal para que todos los edificios mencionados gocen de la suficiente protección y se favorezca su rehabilitación”, además de desarrollar “un programa municipal de ayudas para obras de rehabilitación, accesibilidad y eficiencia energética en los mencionados edificios”.