Según la Junta de Gobierno Local, se detalla la prohibición de “quema de rastrojos, de pastos permanentes y restos de poda; el empleo de asadores, barbacoas, planchas, hornillos eléctricos y de gas, y cualquier otro elemento que pueda causar fuego en el monte y en los terrenos rústicos a menos de 400 metros del monte”.

También el encendido de barbacoas u hogueras en estos espacios, singularmente en el parque de El Soto y Fuentes Claras, “encender fuego a cielo abierto en zonas rústicas, la eliminación de residuos mediante la quema al aire libre, la utilización en espacios de riesgo de elementos pirotécnicos o análogos así como instrumentos que puedan generar deflagración, chispas o descargas eléctricas”.

Se determinan como excepciones cuando “se sitúen dentro de edificaciones cerradas por los cuatro costados, con techo y chimenea dotada de matachispas”, y “con carácter excepcional, y previa petición al Ayuntamiento, se podrán usar las barbacoas fijas instaladas en zonas recreativas, cuando cuenten con autorización expresa de la Junta de Gobierno Local”.

El Ayuntamiento asume la normativa de la Junta de Castilla y León en esta materia. El portavoz del equipo de Gobierno, José Francisco Hernández, se va a realizar un “seguimiento intenso” ante el riesgo de un primavera muy lluviosa, un verano muy caluroso y el “riesgo muy alto” de incendios.
En las últimas semanas ya se han producido algunos incendios en el casco urbano.

Talas
También la Junta de Gobierno Local se ha aprobado la tala de cinco grandes chopos situados junto al río Chico, situados al inicio del atajo al Santuario de Sonsoles.