Esta circunstancia, apunta, “unida a la difícil situación económica que atraviesan muchas familias, conllevará que este año la cifra de niños acogidos se reduzca, a pesar de lo beneficioso que es para ellos pasar un tiempo en nuestro país”.

Los niños de los campos de refugiados saharauis en Tindouf (Argelia) son los veraneantes infantiles que vienen en mayor número pero no son los únicos, pues también proceden de regiones de Ucrania y Bielorrusia, afectadas por la explosión del reactor nuclear de Chernóbil, de orfanatos rusos, y de naciones africanas con crisis humanitarias, como Etiopía, recuerda la edil.

Manuela Prieto ha pedido a las familias abulenses que hagan un esfuerzo por acoger a estos niños y solicitará en la próxima comisión de Atención Social que “el Ayuntamiento ponga en marcha una campaña para hacer una llamada solidaria que anime a incrementar el número de familias de acogida”.