“Recomendamos no realizar” actividades como “verbenas o paelladas”, ha puesto como ejemplo el delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández, con motivo de la reunión del CECOPI, en la que ha participado el presidente de la Diputación, el alcalde de Ávila, y el subdelegado del Gobierno en funciones.

El delegado ha ofrecido los servicios técnicos de la Junta para “supervisar actividades sociales” que se vayan a convocar. “Es bueno que hagamos una reflexión conjunta”, ha dicho, para añadir “nos queda un poquito más”.

En este sentido ha destacado el papel del presidente de la Diputación, Carlos García, como “alcalde de alcaldes”, ya que envió una carta a todos los ayuntamientos para que no “incurran en gestiones” para organizar actividades como “discotecas móviles o paelladas”, habiendo obtenido una “respuesta muy positiva” por parte de de los consistorios.

En algún caso se ha sugerido a algún ayuntamiento, según ha contado, que no convocase actos propios de la “nueva normalidad” para “evitar riesgos”. “Habrá otro verano para otro tipo de eventos”, ha expresado el delegado territorial, tras citar las medidas de restricción del ocio nocturno que entran en vigor este viernes y por 14 días.

Situación preocupante

Hernández ha reconocido que se vive una “situación complicada y preocupante”, si bien Ávila se mantiene en nivel de riesgo medio, donde el mayor índice de contagios se registran entre el colectivo de personas de entre 12 y 19 años, que no se encuentran vacunados.

Ante los datos de contagios “que van creciendo”, ya que el jueves aumentaron en Ávila, se ha mostrado “convencido” de que “se puedan ralentizar” gracias a la vacunación. A pesar de que se han recibido menos dosis “no se ha bajado el ritmo” de vacunaciones y, de cara a agosto, se espera alcanzar a la población de menos de 30 años y “acelerar” el proceso si llegan más vacunas, siempre por edades, de acuerdo a la estrategia de la Junta.

“No podemos criminalizar a los jóvenes”, ha señalado, para destacar su “comportamiento ejemplar durante la pandemia”, si bien ha reconocido que “puede que se haya provocado una relajación los propios hábitos del comienzo del verano y la relajación de las costumbres” y el final del período lectivo. También ha perjudicado que no sea obligatorio el uso de la mascarilla, que el delegado de la Junta ha calificado como “medida desafortunada”.

“Que se tienen que divertir, que se lo tienen bien ganado”, ha dicho el delegado, a la vez que ja llamado al “ocio seguro y en la medida de lo posible, saludable”.