El festival, que antes se celebraba en septiembre, se propuesto “atraer a los abulenses y también a quienes visiten la ciudad con una oferta que no solo se centra en los espectáculos de magia sino también en la promoción de los espacios patrimoniales y en la implicación del sector de la hostelería”, según la teniente de alcalde de Empleo, Industria, Comercio y Turismo, Ávila, Sonsoles Prieto.

Además de los magos locales en el patio del Episcopio, también este viernes se ha podido ver ya a magos llegados de Venezuela y también de Castilla y León, que han actuado en el palacio de Los Verdugo, el palacio de Superunda o el Colegio de Arquitectos.

Igualmente, el jardín de San Vicente, la plaza de Adolfo Suárez y, por primera vez, el claustro del Real Monasterio de Santo Tomás, se han convertido en escenarios, a la vez que con la iniciativa ‘Gastromagia’ los trucos de magia llegarán a las terrazas de establecimientos de hostelería de todas las zonas de la ciudad.

A estas actuaciones se unirá la sección de magia extrema y las galas protagonizadas por el mago Miguel de Lucas, magos internacionales llegados de Italia y Bélgica, junto con los procedentes de varios puntos de España, o la gala infantil, que cerrará el domingo el festival (para los espectáculos con entrada, se pueden adquirir en el Centro de Recepción de Visitantes o adquirir online).