Tras conocer las restricciones del nivel 3 aprobadas por la Junta, el presidente de ATRA, Daniel Pérez, ha lamentado que el turismo rural tenga que "continuar con las mismas restricciones de hace meses, acogiendo tan solo a personas de dos núcleos familiares distintos".

Según Pérez, "todo indicaba" que se iba a  poder alojar en los establecimientos a "familiares de cuatro grupos distintos de convivencia"; sin embargo, asegura que se han encontrado con que "la situación no varía en absoluto".

"Esto es un lastre más para los negocios que ya de por sí están intentando salir adelante con las escasas permisibilidades que la Junta propone", ha argumentado Pérez, quien considera "vital para muchos pueblos" que las casas rurales "sigan funcionando".

Y ello, porque "en muchas ocasiones es la única fuente de ingresos, o la principal, de sus vecinos, que también viven del movimiento que produce este tipo de turismo" al que defiende por ser "seguro", al desarrollarse al aire libre y permitir estar en espacios amplios y abiertos. 

El presidente de ATRA ha incidido en la necesidad de que sean los propios gobiernos, causantes de "este desfalco a las familias", los que elaboren y pongan en marcha un "plan de incentivación al turismo rural, para intentar paliar los graves efectos de la crisis", ya que, si bien reconoce que las reservan "van aumentando con cuentagotas", la recuperación total "queda lejos aún".