La iniciativa responde al doble objetivo de "fomentar la conciencia del reciclaje, incrementando las opciones para que las familias sotillanas redoblen su esfuerzo por el cuidado del medio ambiente y a la vez ayudar económicamente a la AECC de Ávila, que tan extraordinaria labor realiza en la atención y cuidado de pacientes y familiares".

Para ello, el Ayuntamiento sotillano ha ubicado dos contenedores en forma de corazón para que los vecinos depositen allí los tapones de plástico que obtengan de su uso cotidiano. 

Estos tapones pueden proceder de todo tipo de envases: leche, detergente, bolígrafos, champú, suavizante, lejía, gel, botellines de agua o refrescos, pasta de dientes, envases alimentarios y tetra bricks, bombonas de butano, productos de limpieza, desodorantes, vasitos dosificadores de medicamentos...

Uno de los contenedores se ha instalado en la zona de El Calvario y el otro, en La Pasada, y el Ayuntamiento se encargará de su mantenimiento y vaciado cuando estén llenos. Por acuerdo unánime de toda la corporación municipal, la recaudación que se obtenga por el reciclaje de los tapones irá destinada íntegramente a la AECC Ávila.