En esta ocasión, los concentrados ante la Delegación Territorial de la Junta, la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento de Ávila, han llevado una docena de huevos, un saco de pan duro y otro de estiércol

“El saco de pan duro porque nos han quitado el hambre, la basura por cómo nos están tratando y los huevos, porque hay que tener huevos para tomar las decisiones que hay que tomar y dejarnos vivir y comer a nosotros los huevos como plato de comida”, ha explicado José Fernando Alfayate, presidente de la Federación Abulense de Hostelería, que ha dicho que el colectivo está “bastante decepcionado y cabreado”.

“El señor -Francisco- Igea -vicepresidente de la Junta- nos ha vuelto a engañar otra vez. Este señor nos dijo que iba a hacer la desescalada por provincias y resulta que nosotros tenemos una incidencia más baja del 25% en Ávila y cuando pensábamos que íbamos a desescalar, nos han dicho que teníamos que esperar a la media de toda la Comunidad”, ha argumentado.

En este contexto, ha tirado de símil para referirse, tanto a Igea, como al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco: “Yo, personalmente, no me querría poner en manos de este señor como médico, porque pensamos que actúa como un chamán, ese chamán que da vueltas alrededor de ti, te escupe las pócimas a la cara, sin ningún rigor científico, mientras el jefe de la tribu, el señor Mañueco le está mirando”.

Además de insistir en la sensación de “engaño” que siente el colectivo, Alfayate espera que esta sea “la última vez” que les cierran, porque “no s epuede dar ningún paso atrás”.

Personas non gratas

Por su parte, el secretario de la federación, Alberto Rosado, ha reconocido que los hosteleros abulenses se encuentran “afligidos, cabizbajos, desilusionados, tristes, enfadados, preocupados, incomprendidos...”.

“No podemos pensar en resolver los problemas, pensando de la misma forma en que los creamos. Esto es inconcebible y es lo que se lleva haciendo un año. Decir menos y hacer más”, ha argumentado Rosado, antes de añadir: “Si hacemos siempre lo mismo cada vez, no podemos esperar resultados diferentes. Siempre los castigos a los mismos, no puede ser”.

Desde su punto de vista, “lo más triste es sentirse engañado una vez más”. “Esto es lo que vienen haciendo el señor chamán y el señor jefe de la tribu, que además pensamos declararles personas non gratas desde la hostelería abulense, porque no queremos que lleguen a nuestros negocios. Es más, si tienen que pasar por ellos, pues bueno, hasta la puerta”, ha argumentado Rosado.

Un 155
Ante el que considera “el mayor desgobierno sufrido en democracia”, el secretario general de la federación ve “alucinante que el Gobierno central no tome acciones de una vez por todas”. “No sé si la responsabilidad les abruma o es porque este sector nunca ha sido su caladero de votos, pero hoy ya empiezo a pensar seriamente en pedir un 155 al Gobierno central, el segundo en democracia”, ha sostenido.

En este contexto, ha añadido que “es preferible en este momento estar intervenido, que estar dirigido por unas personas que creo que solo buscan la fotografía”.

Asimismo, ha pedido “por favor” a las autoridades que tengan a los hosteleros “en consideración”, ya que es un sector “arruinado y al borde de la tragedia”.

Tras recordar que en su momento ya estuvieron de acuerdo con endurecer las sanciones a aquellos que incumplieran las medidas, Rosado ha dado prácticamente por perdida la Semana Santa, si bien ha hablado de poder “minimizar” los efectos de la situación actual en esos días.