Hasta el viernes, cuando se administraron 679 dosis, se han habían pinchado 11.436 vacunas de las 11.525 recibidas, o sea, más del 99%, sólo restaban 89 sin utilizarse. 

A la espera de la llegada de más vacunas, hasta ahora han sido 10.725 de Pfizer y 800 de Moderna.
Entre las inoculadas, 4.749 han sido para personas de residencias de mayores, 1.098 para las de otras residencias, y cuatro para personas con patologías de riesgo.

De los trabajadores sanitarios, 3.503 han sido para empleados de centros socio-sanitarios, 2.045 para los de centros sanitarios y 21 para trabajadores esenciales. En los datos también figura otra categoría donde se incluye a los vacunos "sin codificar motivo", con 16 personas vacunadas. Hace unos días el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, dijo que trataba de los taxistas que transportan a los sanitarios dedicados a vacunar, si bien llama la atención que en Castilla y León son un total de 38, por lo que casi la mitad son los de Ávila, y en tres provincias solo se ha administrado una vacuna en la categoría de "sin codificar motivo" y en otras tres ningún vacunado incluido en este apartado.