Las localidades afectadas son Garganta del Villar, Navalacruz, Navarredondilla, San Juan del Molinillo, Navalmoral de la Sierra y Cepeda la Mora. Mención aparte merece la depuradora de esta última, cuya infraestructura, que costó 300.000 euros, debe ser ahora derruida a instancias de la Confederación Hidrográfica del Tajo, por invadir la zona de servidumbre del río.

El secretario provincial del PSOE, Tomás Blanco, ha criticado la “inacción” de la Junta de Castilla y León, a la que ha acusado de “falta de previsión”.

También ha llamado la atención sobre el hecho de que, si bien la Junta no pone en marcha las depuradoras, “se han incrementado las tasas del canon de vertidos y algunos de los municipios han recibido denuncias de la propia Confederación, por el vertido de aguas sin tratamiento.

Blanco exige que se minimicen los costes y que se supriman las multas por vertidos continuados de aguas residuales, al tiempo que pide a la Junta de Castilla y León que se invierta el dinero necesario para que se pueda proceder al arranque de las depuradoras de todos los municipios.