“El alcalde hace propaganda con el abono de facturas atrasadas que, insistimos, no suman lo que dice”, ha señalado Sánchez-Reyes, que insta al regidor a que las muestre: “Nadie puede dudar de que, si estuviera en disposición de acreditar que las facturas suman esos cuatro millones, las habría pregonado a diestro y siniestro con fotos y toda la parafernalia que acostumbra”. 

En este contexto, la portavoz ha acusado a Sánchez Cabrera de “hacer propaganda con el abono de facturas atrasadas en el Consistorio para tapar, usando el nombre del PP, su escasez de ideas, su desconocimiento de la gestión municipal, su abandono al tejido económico que tanto sufre la pandemia y su desidia para hacer que Ávila avance”. 

“Como el alcalde sólo sabe hacer política de brocha gorda y vuelo corto, sale su lugarteniente -en referencia a José Ramón Budiño- a mezclar y a remover asuntos que están muy claros: el primer edil dice que se encontró cuatro millones en facturas atrasadas y los populares le hemos pedido, el 5 de mayo del año pasado por Registro, que enseñe la lista detallada donde eso quede demostrado. Pero no la enseña porque sabe que es falso”, ha apuntado Sánchez-Reyes, un día después de que Budiño le pidiera a la portavoz popular que estuviera "atenta" a las juntas de gobierno en las que se aprueba el pago de las facturas atrasadas.

Además, la edil sostiene que “cuando uno acusa, debe aportar pruebas"; sin embargo, admite no tener "esperanza de que lo haga". "Por otro lado, ya se ve que el alcalde acusa y, cuando se le rebate, se esconde detrás de su portavoz para no sostener una acusación que sabe que no es cierta”, ha añadido.

Para el grupo popular, “nadie puede dudar de que, si el alcalde estuviera en disposición de acreditar que las facturas suman esos cuatro millones, las habría pregonado a diestro y siniestro con fotos y toda la parafernalia que acostumbra”. 

Acerca de las acusaciones a la portavoz del PP de ‘no estar atenta en las juntas de Gobierno’, Sánchez-Reyes responde: "Precisamente porque estoy atenta, aseguro que esas facturas no alcanzan, ni de lejos, los cuatro millones que vende el alcalde".