En un comunicado hecho público por el centro a través de las redes sociales, se informa de que esta situación se debe al "defectuoso funcionamiento de una válvula y una bomba" detectado por el ingeniero responsable de esta instalación renovada para este curso.

Desde el centro se espera que las clases puedan reanudarse el miércoles, si el problema se soluciona, aunque añade que "no es seguro 100%".

"Por lo tanto, el martes no se podrán reanudar las clases porque la temperatura de las aulas lo hace imposible", apunta el comunicado, que aclara que la suspensión "únicamente afecta al colegio y no a otros centros educativos de la localidad".

"En este momento no podemos asegurarlo, pero es bastante probable que el miércoles estemos en unas condiciones mínimas aceptables para abrir el colegio", ha informado el centro educativo.

Igualmente, aclara que con el Consistorio candeledano se ha estado "explorando todas las alternativas posibles para complementar con calefactores eléctricos hasta donde la instalación lo permita". Desde el CEIP se admite que esta situación les tiene "muy enfadados", al considerar que "podía haberse evitado", si bien añaden que "es tiempo de empujar para superar esta situación y ya habrá tiempo de quejarse".

"Las tutoras y tutores se pondrán en contacto con vosotros para recordar a los niños y niñas que, aunque no podemos venir al cole, esta vez por la temperatura, el trimestre tiene que empezar. En principio no creemos que sea necesario iniciar actividades online", argumenta. El comunicado concluye señalando: "Mañana esperamos comunicaros que podemos empezar y también será el momento de recordar las medidas Covid… pero eso es otra historia.Gracias por vuestra comprensión".