Miguel Hernández y Soraya Blázquez han destacado que las cuentas de la Comunidad para 2021 "no arregla el desequilibrio histórico" de la provincia respecto al "desarrollo de otros territorios" de Castilla y León, ya que "lo que ahora se destina tenía que haberse invertido hace años".

Del análisis del proyecto de presupuesto se desprende que la Junta "hubiera diseñado las mismas con pandemia y sin pandemia", lo que a su juicio demuestra que estas cuentas "no dan respuesta al impacto económico y social que ha generado la emergencia sanitaria".

Además, apuntan que son unas cuentas que tienen "un problema de credibilidad", porque la experiencia dice que para la Administración autonómica "una cosa es presupuestar y otra ejecutar", de ahí que consideren "lógico que entre la población haya escepticismo con este proyecto económico".

Aportación del Gobierno

Igualmente, los procuradores insisten en que el incremento presupuestario ha sido posible "gracias a la aportación histórica que ha realizado el Gobierno de España a través de entregas a cuenta, transferencia finalistas y flexibilización del déficit", si bien en el caso de Ávila "no se traduce en impulsar el cambio de modelo producto que necesita la provincia para progresar".

A ello se suma que la Junta "no haya concretado en las cuentas ni consignación ni medidas para hacer frente a los problemas que plantea la despoblación de los municipios, ni dirigidas a los sectores más directamente afectados por la pandemia".

Los procuradores han anunciado que próximamente contactarán con colectivos, alcaldes y concejales, para plantear enmiendas a los presupuestos, que serán "creíbles y realizables, no como el brindis al sol que ha protagonizado el PP con sus enmiendas al proyecto de presupuestos del Estado".