Los detenidos son de nacionalidad colombiana y uno de ellos se encuentra en situación irregular en España, según el instituto armado, que no descarta más detenciones relacionadas con esta operación bautizada como Espino Verde.

Conocida ahora, esta operación se inició el pasado 6 de octubre, cuando agentes de la Guardia Civil que realizaban servicios operativos en Santa Cruz de Pinares tuvieron sospechas de que en el interior de una vivienda podría existir un laboratorio clandestino.

Por eso, se iniciaron las correspondientes investigaciones, que culminaron corroborando que tal laboratorio existía, lo que hizo que se pusiera en marcha la operación. Tras las averiguaciones, los agentes solicitaron autorización judicial para realizar la entrada y registro domiciliario el pasado 28 de octubre, siendo incautadas 463 plantas de 100 kilos de peso y otros 12 kilos de marihuana en proceso de secado, ya dispuesto para su venta posterior.

Además, fueron detenidas dos personas: una era la encargada de realizar las labores de riego y el resto de mantenimiento y riego, mientras que la segunda, que fue quien contrató a la primera, era el supuesto cabecilla principal de la trama.

Contador puenteado

Al mismo tiempo, defraudaban presuntamente el fluido eléctrico, mediante el "puenteado del contador para así obtener electricidad de manera gratuita". Finalmente, el 5 de noviembre, la Guardia Civil descubrió a un tercer implicado que supuestamente había alquilado la vivienda para "poder delinquir en su interior".

Tanto los detenidos, todos ellos de nacionalidad colombiana, como lo incautado, fueron puestos a disposición judicial, ingresando dos de ellos en prisión, sin que se descarten nuevas detenciones durante los próximos días.

Esta operación ha sido desarrollada por el Equipo Roca de la Guarda Civil de Cebreros (Ávila), en colaboración con el Equipo la Usecic de la Comandancia de la Guardia Civil de Ávila y Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil de Las Navas del Marqués.