Como si fuera una tormenta de verano, la precipitación registrada ha sido de 8,2 litros por metro cuadrado. Ha dejado balsas de agua en la rotonda situada ante Nissan, que se encuentra en obras; y en las calles Hornos Caleros y Perpetuo Socorro, donde han intervenido los bomberos y la Policía Locak, que también han acudido, ante tapas de alcantarilla levantada, al Polígono de Las Hervencias y a la calle Víctimas del Terrorismo.

La tormenta ha caído sobre las 19,30 horas acompañada de fuerte viento, con una racha máxima de 64 kilómetros por hora, en un día de temperaturas benignas, con 14,5º de máxima y 9,4º de mínima.

Estas actuaciones se suman a las del jueves, también por balsas de agua y la caída de vallas, árboles y fachadas, día en que cayeron 6,4 litros. El nivel amarillo por tormentas se mantiene hasta las 8 horas del sábado.