Más de una semana después de que el PSOE no votase en las Cortes de Castilla y León una proposición no de ley de PP y Ciudadanos en la que se instaba al Gobierno a proteger la Constitución como norma fundamental del Estado, defender la unidad de nuestra nación y la igualdad de derechos y deberes de los españoles, y defender y proteger la figura del jefe del Estado, el Rey Felipe VI”, García Nieto ha criticado a los socialistas y al Gobierno.

“Nunca creímos que íbamos a ver al Partido Socialista blanquear a los terroristas de ETA empleando como interlocutores habituales a Bildu, brazo político de los asesinos, cuando ellos han tenido que sufrir, como nosotros, muchas muertes entre sus filas”, ha afirmado, recordando que los socialistas votaron “rotundamente en contra” en palabras de su portavoz.

“Nunca imaginamos -ha añadido- que el presidente del Gobierno de España iba a estar de rodillas, sumiso y dispuesto a lo que sea con tal de conservar la poltrona de La Moncloa, preso de los antisistema, de los comunistas y de los filoetarras y de los separatistas para destruir el régimen constitucional”.

Actitud cobarde

García Nieto ha acusado a los procuradores socialistas de mantener una “actitud cobarde” y ha mostrado su sorpresa por que “el Partido Socialista de Castilla y León y el de Ávila se nieguen a reivindicar su propio legado, su vocación democrática, a decir lo que sus afiliados y sus votantes les están pidiendo”, estando en una provincia donde nació el “artesano de la Transición”.

Los procuradores del PP dicen estar “apenados, defraudados, indignados y decepcionados, pero exigentes, firmes y plenamente convencidos” de defender “los principios, los valores, los símbolos y las instituciones que nos unen y que han hecho que la concordia fuera posible en nuestro país”.

“Nos esperábamos cualquier cosa del maleducado líder comunista”, ha dicho del portavoz de Podemos, Pablo Fernández, “pero no de nuestros compañeros socialistas”, ha dicho de los parlamentarios por Ávila, Miguel Hernández y Soraya Blázquez, que “venden su alma al diablo”.