En la octava edición del concurso organizado por el Consejo Interprofesional de los Vinos de Rosellón se han valorado 832 vinos de todo el mundo, principalmente de uva garnacha como variedad de uva que ocupa el séptimo lugar entre las más plantadas en el mundo, y el tercer puesto  en Europa donde Francia, España e Italia son los principales productores.

 
La bodega de Lanzahíta elabora este crianza con uva 100% garnacha procedente de El Barraco, con cepas situadas a 900 metros de altitud y con más de 70 años. Tras una vendimia manual en cajas de 15 kilos, la uva es almacenada a 5º durante 15 horas,  para posteriormente ser despalillada y seleccionada uva a uva para que entren en el depósito las uvas en estado óptimo de maduración.

 
"Conseguir que la maduración fenólica sea la adecuada es cada vez más difícil debido a aspectos vinculados al cambio climático” y “no todos los años se consigue un equilibrio entre todos los tipos de maduraciones de la uva", según Celia de Dios Lafuente, directora técnica de la bodega.

 
A continuación, inicia la fermentación alcohólica con levaduras autóctonas a temperatura controlada y posteriormente realiza la fermentación maloláctica en la propia barrica de roble francés de 500 litros, donde inicia una crianza de seis meses antes de ser embotellado. 

 
La bodega familiar creada en 2013 para recuperar viejos viñedos cuenta con cinco referencias de las que se venden 15.000 botellas, 2.640 del vino premiado.