En ambos casos, los rebaños de animales, que estaban sanos, se encontraban en parcelas cercadas, según la información que ha facilitado la organización agraria UCCL.

El ganadero de Vega de Santa María habla, y así lo constata en las imágenes que grabó en vídeo, de “dos centenares de buitres, tanto leonados como negros”, que además de matar a los terneros, causaron daños al resto de animales del rebaño, “que están estresados”.

Por su parte, el ganadero de Riocabado vio “hasta medio centenar de buitres comiendo los animales”.

Según UCCL, un agente medioambiental del Servicio Territorial de Medio Ambiente se ha acercado al lugar de los hechos y ha emitido un informe sobre lo sucedido, que puede repetirse “en cualquier momento”, de ahí que los ganaderos estén “constantemente vigilando sus rebaños”.

Al ser un “caso idéntico a los ataques de lobos”, desde UCCL exigen a la Junta de Castilla y León que indemnice directamente a los ganaderos afectados, al tratarse de “un daño patrimonial evidente” y “que no se requiera de la suscripción de seguro alguno”.

Por otro lado, UCCL considera “vergonzosa” la actitud del Gobierno autonómico, ya que “sigue sin publicar el decreto que aplicará al territorio castellano-leonés la legislación nacional sobre la alimentación de estas aves carroñeras con los cadáveres de la ganadería extensiva”. Con dicha medida "se podría evitar los ataques y muertes de reses sanas", según la organización agraria.