La lobada ha tenido lugar en un cercado que contaba con dos mastines que no han podido proteger al ganado que se se encontraba en su interior.

En total, los lobos han dejado once ovejas muertas (seis en el momento del ataque y cinco al día siguiente) y otras nueve heridas, de las cuales cinco "no tienen posibilidad de sobrevivir" debido a "la enorme gravedad" de sus lesiones, según la conclusión final de los servicios veterinarios a los que alude UCCL.

Esta organización agraria señala que, las "grandes consecuencias" de estos ataques en las explotaciones ganaderas demuestra "la grave situación" por la que los ganaderos abulenses, de manera que "si no se ponen medidas", esta situación "va a terminar con el medio de vida de muchas personas".

UCCL ha vuelto a denunciar que este es el asunto "más serio" al que se enfrenta el sector ganadero en la provincia de Ávila, debido a la "situación tan crítica" del colectivo.

En este sentido, ha recordado que se trata de unos daños que "no se compensa con una cantidad económica, ya que la perdida "llega a ser algo personal que no se queda en algo económico, sino de algo en lo que han estado trabajando y dedicando mucho tiempo".