Del total de decesos contabilizados en los meses de mayo y junio, que fueron 264, el 20% es atribuible al Covid-19 y a causas compatibles con la pandemia, porcentaje que supone ochos puntos más que la media de Castilla y León. En concreto, confirmados con el virus han sido 28 y sospechosos 25.

Los fallecimientos por motivos sospechosos de ser compatibles con el coronavirus se refieren a aquellos en cuyas certificaciones médicas existen procesos patológicos que pueden haber sido originados por la pandemia.

Estos datos se conocen a raíz de que el pasado 18 de junio, en ejercicio de las facultades de inspección que le corresponden, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León , José Luis Concepción, acordó solicitar a los juzgados de Registro Civil de Castilla y León los datos sobre fallecimientos certificados durante mayo y junio del presente año, así como los de 2018 y 2019.

Esta actuación se enmara en las iniciativas derivadas del Protocolo del Consejo General del Poder Judicial para la prestación de los servicios judiciales durante la pandemia, entre ellos los referentes a las actuaciones de Registro Civil y, especialmente por su trascendencia, los relativos a la inscripción de defunciones y a la expedición de las licencias de enterramiento.