Según Jesús Muñoz, presidente de la organización agraria, “los lobos están incrementando sus ataques en la Sierra de Ávila, justo donde comenzaron sus fechorías en la provincia hace ya tres lustros”.

El último caso se produjo el día 10, donde mataron a ternera de 17 días y dejaron malherida a otra de mes y medio de edad, propiedad de una ganadera cuyas reses se encuentran en Gallegos de Altamiros, a 500 metros del casco urbano, en el paraje denominado El Esperón.

Después de muchos años con “un número ínfimo de ataques en la zona, hace aproximadamente seis meses que han vuelto a reanudarse”,  y en este mismo municipio hace medio año mataron a varias ovejas, y “hace sólo dos meses volvieron a cinco ovejas”.

En el vecino término municipal de Sanchorreja, hace menos de un mes, también se produjo otro ataque a una explotación de ganado vacuno.