De esta manera, el presupuesto inicial de 50.000 euros, se incrementará hasta los 100.000, gracias a la declaración de emergencia decretada por el alcalde el 20 de marzo, que permite al Consistorio realizar determinadas actuaciones sin la tramitación habitual, con el objetivo de agilizar estos trámites en situaciones como la actual.

Según el Ayuntamiento, "la urgencia y necesidad de la situación ha llevado a tener que destinar más fondos a este fin".

La ampliación del cementerio incluye 66 sepulturas, de las cuales 58 ya están disponibles en tres de las cinco zonas habilitadas (las otras dos están en ejecución). Además, se realizarán diez nichos.

Las obras contemplan las obras de desviación del colector de evacuación las aguas pluviales del cementerio, con el fin de ganar más espacio en el interior del actual perímetro, para situar en el mismo nuevas fosas.

Incremento de la mortalidad

Las cifras de mortalidad se han disparado. Solo desde el 15 de marzo y hasta el 1 de abril se realizaron 48 entierros y 101 incineraciones. El año pasado en esas mismas fechas se llevaron a cabo 18 inhumaciones y 19 incineraciones.

El jueves han tenido lugar ocho enterramientos en el cementerio, cifra que llega a triplicar a las habituales en estas fechas.

Respecto a las incineraciones en el Crematorio Municipal en todo el mes de marzo se produjeron 116, aunque 101 corresponden al periodo comprendido entre el 15 de marzo y el 1 de abril.