Han sido 1.500 mascarillas, 1.000 guantes y 210 buzos o monos los que se llevaron a la Delegación Territorial de la Junta en Ávila en la tarde del domingo. 

En este sentido, la consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha manifestado que Castilla y León dispone de material para atender la demanda actual, si bien ha advertido que hay que contar con más ante la posibilidad de que “se dispare” el número de casos de coronavirus.

"Hemos tenido una gran respuesta", ha dicho, a la vez que ha mostrado su agradecimiento por la solidaridad de ciudadanos y empresas ante la llamada de la Junta. “Para nosotros fue muy importante, ante la llamada de dos hospitales sobre problemas se pidió ayuda”, ya que “los profesionales son la herramienta fundamental para luchar contra el virus”, por lo que “hay que protegerlos”.

Se recogieron en Burgos 4.220 mascarillas, 2.500 guantes, 20 gafas y 413 buzos; en Palencia 2.370 mascarillas, 1.100 guantes y 74 monos; en Valladolid 9.570 mascarillas, 2.000 guantes, y 560 buzos; en León 750 mascarillas, 500 guantes y 370 buzos; en Salamanca 580 mascarillas, 4.000 guantes y 108 buzos; en Zamora 200 mascarillas, 1.000 guantes y 100 monos; en Soria 470 mascarillas, 1.600 guantes y 110 buzos; y en Segovia 200 mascarillas, 3.000 guantes, 30 gafas y 185 buzos.

Más material

El Gobierno ha comenzado a enviar a las comunidades material, pero “menos" del solicitado. En Castilla y Leóm se cuenta con 100 respiradores adquiridos recientemente.

"No queremos gestos de heroísmo de nuestros profesionales porque los necesitamos", ha dicho el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, quien ha asegurad que es necesario asegurarse de que desde el Gobierno autonómico “no se deja nada sin hacer para proteger a los profesionales”. "Haremos todo lo que sea necesario, al coste que sea necesario para proteger a nuestros profesionales", ha señalado.