A través de los telescopios terrestres se han observado varios ejemplares de cigüeñas blancas (ciconia ciconia), especie cuyos nidos se encuentran en la torre del convento de Santa Ana. 

Con esta actividad se pretende “acercar visual y emocionalmente esta especie tan entrañable y cercana desde una visión más próxima”, según Jorge Leonor, del grupo local de Seo Birdlife, haciendo también protagonistas a los niños, que se han preparado una careta y una cigüeña en miniatura con un material reciclado.

“Queremos destacar -ha explicado- la labor beneficiosa de esta especie puesto que es capaz de controlar las poblaciones de pequeños roedores y topillos, hecho que convierte a la cigüeña en una aliada eficaz en el control biológico natural de estas especies y también de insectos que pueden ser perjudiciales para la agricultura y para la salud en general”.