La operación Machmalo ha sido explicada por la delegada del Gobierno en Castilla y León, Mercedes Martín, y por el teniente coronel de la Comandancia de la Guardia Civil en Ávila, Miguel Ángel Balbás.

La primera detención fue el 22 de enero en un chalé de Navaluenga, y esta semana otras cuatro: dos en Alcobendas (Madrid), una en Ávila y otra en Cebreros.

En el interior de la vivienda la Guardia Civil se incautó de 365 plantas de marihuana; 14 transformadores eléctricos; 14 lámparas; ventiladores; extractores; así como diversos útiles para la elaboración y tratado de la plantación. También se comprobó que el contador eléctrico estaba puenteado, por eso el supuesto delito por defraudación de fluido eléctrico.

"Hemos conseguido detenerlos, pensamos que a todos los implicados”, ha dicho el responsable de la Guardia Civil. Fue "determinante" la actuación de los agentes de Seguridad Ciudadana de Navaluenga, en una operación que comenzó a principios de año al tener "sospechas fundadas" de la posible existencia de un laboratorio clandestino en la modalidad de "indoor" en las inmediaciones de Navaluenga.

El perro marcó el chalé

Se verificó la existencia de dicho laboratorio por la utilización de un perro de drogas del Servicio Cinológico de Salamanca, ya que el marcó positivamente en una zona del perímetro exterior de la vivienda en cuestión.

También se determinó que se estaba cometiendo supuestamente un delito de defraudación de fluido eléctrico, al detectarse irregularidades en el transformador que da suministro a la zona en la que se encontraba ubicado el presunto laboratorio.

Una vez obtenida la correspondiente autorización judicial para llevar a cabo la entrada y registro al interior de la vivienda, además de encontrar las 365 plantas de marihuana y todos los utensilios empleados para la elaboración y tratado de la plantación, se verificó que el contador eléctrico estaba puenteado.

La operación ha sido desarrollada y explotada por el Equipo Territorial de Policía Judicial de la Guardia Civil de Cebreros, con la colaboración del Servicio Cinológico de Salamanca y Seguridad Ciudadana del Puesto de Navaluenga.