La recaudación obtenida fue de 1.000 euros, que irá destinada a las viviendas supervisadas. 

Al entregársela a la directora general de Faema, Inmaculada Pose, el director de la empresa, Ángel Muñoz Muñoz, ha agradecido la aportación de los trabajadores, “demostrando así la implicación social empresarial no sólo de la empresa sino también del personal, que son el motor esencial de la compañía”.

Durante la cena se proyectó un vídeo sobre las 11 viviendas supervisadas, donde conviven 50 personas con problemas de salud mental, y se trabaja en otras dos en el primer trimestre. En ellas se atenderá a nueve personas y se crearán dos empleos.