Por un lado, el personal especializado de la Junta abatió un lobo en el término municipal de San Bartolomé de Pinares, que pertenece a la comarca agraria del Bajo Alberche, el 30 de septiembre.

Unos días después, el 9 de octubre, se mató a otro ejemplar en el término municipal de Tornadizos, en la comarca agraria de Ávila.

En ambos casos, se trata del segundo que ejemplar que se mata en ambas comarcas agrarias. Se trata de una medida de control autorizada por la Dirección General de Medio Natural ante los graves ataques que sufren las explotaciones ganaderas en estas comarcas.

Las organizaciones agrarias exigen constantemente aumentar el cupo de lobos a abatir para evitar los contimuos ataques al ganado.