Para la FeSP esta situación demuestra una "falta de previsión total", ya que "se conocía la fecha de jubilación del juez titular desde hace tiempo más que suficiente para haber cubierto la incidencia".

Según ha constatado el sindicato, esta situación esta provocando "un tremendo retraso" en la celebración de juicios, que han quedado "totalmente paralizados y se están empezando a acumular". Además, se han suspendido "todos los pendientes de septiembre y ahora se están empezando a suspender los de octubre".

Y todo ello, sin que se conozca "una fecha cierta o aproximada de cuando van a comenzar las vistas", según ha denunciado la federacion sindical, que describe cómo las nuevas demandas "se van acumulando sin poder ser resueltas", hasta el punto que existe "algún juicio que se ha suspendido tres veces ya".

Un solo Juzgado de lo Social

Este sindicato recuerda que Ávila "solamente" cuenta con un juzgado de lo Social, y que, por lo tanto, "no hay forma de que pueda salir adelante ni una sola demanda hasta que no se incorpore un nuevo juez o jueza".

UGT cree que esta situación "va a causar un grave perjuicio tanto a los trabajadores, como a las empresas de la provincia", teniendo en cuenta que "todas las situaciones de despidos, expedientes disciplinarios... van a quedar paralizados, sin ni tan siquiera fecha probable de celebración".

Además, los funcionarios del juzgado se van a ver "enormemente perjudicados" porque se están acumulando una "gran cantidad de expedientes que después va a ser realmente difícil conseguir que se pongan al día".

Por todo ello, UGT va a solicitar una reunión con el subdelegado del Gobierno, Arturo Barral, para "pedir su ayuda" y "ver las posibilidades de que, a través del Ministerio de Justicia, pueda contactar con el Consejo General del Poder Judicial y exponerle el problema", con el objetivo de encontrar una "posible solución".

"Esta situación es insostenible y si se prolonga en el tiempo el perjuicio va a ser muy grave", critican.