Hay, y hubo, otra ciudad con aspectos también relevantes, que se ocultan porque muestran otra cara, otra historia de la ciudad menos vistosa, o quizá vergonzosa, para los detentadores del poder.
Bajo estas maneras de ver la ciudad, exaltadas unas y ocultadas otras, corre la vida de la gente corriente que nada tiene que ver con Caballeros, Santos, Leales, Grandezas…, cuyas vidas constituyen sencillas historias encerradas entre los muros de la casa y de la ciudad, o vividas en relaciones de amistad y amor, o en soledad; historias de vidas de las que no se ocupa la historia oficial. Sin embargo, es por esta íntima intrahistoria por donde fluyen los sentimientos, las pasiones, los anhelos; se sienten las penas, tristezas y alegrías; se disfruta la belleza y se sufre el dolor, que conforman el vivir humano.
Esta preocupación por la importancia y valor de las consideradas pequeñas cosas, cuya expresión y manifestación encontrarían su lugar más idóneo en la pequeña ciudad, es la que se recoge, desde la presentación, en el libro de Antonio Pascual Pareja ‘Historias de la pequeña ciudad’, (Pre-Textos, 2019): “Todo lo realmente valioso es parvo […]. Todo lo importante es pequeño y, por ello, fácil de perder”. El libro es una lectura de la ciudad (aunque en ningún momento diga que es Ávila, se reconoce fácilmente), muy alejada de tópicos y “oficialidades”, es una visión de la ciudad como crisol en el que se forjan los sentimientos, emociones, pasiones, las esperanzas de los anónimos personajes que la habitan, como marco desde el que se instalan en el mundo. El “nunca pasa nada” de los pequeños pueblos y ciudades está lleno de tantas pequeñas cosas, de tantas pequeñas vidas que son, precisamente, las que dan lugar a la grandeza que se oculta bajo el manto de la quietud y la intemporalidad.
Antonio Pascual Pareja va desgranando historias de gentes de la pequeña ciudad con enorme cariño, con una emoción y poesía que atrapa desde la primera línea. No creo exagerar si les digo que para mí ha sido uno de los libros que más me han conmovido en muchos años.
Con ‘Historias de la pequeña ciudad Pascual’ Pareja sigue en la línea de preocupaciones que mostraba en ‘Invisible Pablo’ (La Veleta, 2017). En este convierte su vida y actividad de profesor en materia literaria. Y lo hace desde dentro, desde donde no se ve, desde el mismo profesor, invisible para los alumnos y compañeros, casi como la crónica sentimental de un joven profesor de instituto en pueblos y ciudades de Castilla. ‘Invisible Pablo’ viene a ser un soliloquio (“converso con el hombre que siempre va conmigo”, como decía A. Machado), una conversación con “ese hombre invisible” que lleva dentro y por secretas galerías llega a las profundidades donde brotan los sueños, los deseos, los miedos; fraguan las experiencias…, y que Antonio Pascual muestra con la sinceridad necesaria para comprender que estamos ante un ejercicio de humanidad.
Es indudable el carácter autobiográfico que desprenden ambos libros, que nos permiten descubrir al observador de la vida de sus paisanos y al profesor que cuenta lo que no dice en clase ni en claustros, que deja ver las alegrías y frustraciones que produce enfrentarse todos los días a unos alumnos que están en otra onda, pero también lo que los alumnos le van enseñando y, en cierta medida, construyendo.
Si ‘Historias de la pequeña ciudad’ está recorrido por su amor a Ávila y sus gentes, ‘Invisible Pablo’ lo está por su pasión por la literatura y su enseñanza, y por contagiar el virus de la lectura.
Como cita Antonio: “Leemos para saber que no estamos solos” (C. S. Lewis). Disfruten de su lectura.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.140